Pastel de cebollas rojas caramelizadas con queso Vincent
Este delicioso pastel combina cebollas rojas dulces caramelizadas con tomillo y queso Vincent. Delicioso, servido caliente con patatas y ensalada verde.
Este delicioso pastel combina cebollas rojas dulces caramelizadas con tomillo y queso Vincent. Delicioso, servido caliente con patatas y ensalada verde.
Para 6 personas
Tiempo de preparación: 10 minutos
Tiempo de cocción: 1 hora y 10 minutos
Ingredientes
25g de mantequilla
3 cebollas rojas grandes, cortadas finamente
30ml de tomillo fresco picado
350g de pasta quebrada
330ml de crema fresca (crème fraîche)
3 huevos medianos
Un pellizco de nuez moscada
150g de queso Vincent rallado
Tomillo para el aderezo
Preparación
1.Derrita la mantequilla en una sartén grande, añada las cebollas y el tomillo, tape y déjelo en el fuego durante 30-35 minutos. Remueva de vez en cuando, hasta que las cebollas empiecen a caramelizarse. Deje enfriar.
2.Precaliente el horno a 190 °C. Saque la masa de pasta quebrada y utilice un molde para quiches de 23 cm con el fondo desmontable. Cubra la base con el papel de horno y rellene con habas o guisantes. Hornee durante 15 minutos, a continuación, quite el papel y las habas y vuelva a colocar en el horno durante 5 minutos más hasta que se dore.
3.Coloque la crema fresca, los huevos y la nuez moscada en un recipiente y bátalo todo. Añada las cebollas y la mitad del queso Vincent y viértalo todo en el fondo de la base de la masa. Espolvoree con el queso restante y con una pequeña cantidad de tomillo.
4.Hornee durante 30 minutos hasta que la parte de arriba esté dorada y el relleno listo. Deje enfriar durante 5 minutos y, a continuación, corte en rodajas. Sirva con un tomate y ensalada verde variada.
Truco del cocinero
Una vez que haya introducido la masa en el molde, coloquelo en el congelador durante 15 minutos para que la masa se asiente y mantenga la forma cuando se cocine en el horno.
Los holandeses son reconocidos en todo el mundo por producir una amplia variedad de productos de alta calidad. El éxito de muchos de sus productos se debe a una combinación única de creatividad diversa, producción de primera calidad y una tradición antiquísima.
Cuando mejor se exhibió la maestría y el talento de Holanda fue durante los siglos XVI, XVII y XVIII con varios pintores holandeses de calidad excepcional. Los nombres de Rembrandt van Rijn, Vincent van Gogh, Johannes Vermeer y Frans Hals son famosos en todo el planeta.
La calidad de su trabajo no ha tenido parangón durante siglos; las obras maestras que crearon todavía inspiran y deleitan a muchas generaciones.
Esta inspiración nos lleva a elaborar una gama de quesos holandeses de alta calidad, con la marca A Dutch Masterpiece (Una Obra de Arte Holandesa). Nuestra meta a la hora de crear los quesos era la misma que los famosos pintores holandeses de antaño; crear algo tan exquisito que proporcione placer a todo el mundo.
Cada queso en el surtido de A Dutch Masterpiece (Una Obra de Arte Holandesa) se ha creado para brindar una experiencia de sabores sin igual. Cada variedad posee su propia receta característica, seleccionada minuciosamente, y su proceso de maduración que obtiene como resultado un sabor, un aroma y una textura inconfundibles.
A Dutch Masterpiece es una creación de Royal FrieslandCampina de Holanda.
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